¿Cómo Cupieron Todos los Animales en el Arca de Noé?  P2 de 2

 ¿Cómo Pueden Todos los Animales Provenir del Arca de Noé?

El Arca de Noé era muy grande. Ministerios cristianos y varios autores de reputación, proveen recursos que explican los detalles que la Biblia da respecto al tamaño del Arca, y de cómo los tipos principales de criaturas vivientes pudieron caber y habitar en el Arca todo el año que estuvieron encerrados en ella: Las organizaciones Answers in Genesis (AiG) y The Institute for Creation Research (ICR), entre ellas.

No es mi intensión presentar un estudio de factibilidad matemática, o de física y de hidráulica, respecto al Arca, su diseño, estabilidad y capacidad. Si bien tal información sería de interés, y algunos han hecho esos estudios, es mi deseo considerar acá un par de pasajes bíblicos relevantes al tema, los cuales ayudarán al creyente sincero resolver este asunto de una vez por todas en su mente y corazón

Consideremos: En las dos ocasiones que Jesús milagrosamente alimentó multitudes, durante su ministerio en la Tierra, ocurrieron actos creativos.

En Mateo 14:15-21 leemos que en la alimentación de los 5,000 lo único con que contaban sus discípulos era cinco panes y dos peces. Jesús levantó sus ojos al cielo bendiciendo el pan y los peces, y... ¡se dio el milagro! Cinco mil hombres, más las mujeres y los niños, fueron todos alimentados.

En el segundo milagro de la multiplicación de panes y peces, Jesús alimentó cuatro mil hombres, más las mujeres y los niños. El Hijo de Dios sólo contaba con siete panes y unos cuantos peces en esta ocasión. Pero los multiplicó milagrosamente... ¡alimentando miles! El evento está registrado en Mateo 15:32-38.

Para mí no es difícil aceptar que todos los animales de hoy en día provienen de los que entraron al Arca de Noé. No me es difícil gracias al Espíritu Santo y la gracia de Dios. Primero tenemos que entender que Dios mismo trajo los animales al Arca. En Gen 6:20 leemos: “De las aves según su especie, de los animales según su especie y de todo reptil de la tierra según su especie, dos de cada especie vendrán a ti para que les preserves la vida.” Obviamente Dios escogió animales que tenían una amplia piscina genética, y por supuesto que no trajo los animales más viejos y grandes de cada tipo.  

Además, de la misma manera que Dios multiplicó el pan y los peces en dos ocasiones, Él pudo milagrosamente haber multiplicado las especies que salieron del Arca, ya sea cuando iban saliendo, o inmediatamente después. Recuerda, unos cuantos panecillos fueron puestos en las manos de Jesús, y de sus manos salieron... ¡miles! De la misma manera, no veo ningún problema en creer que todas las especies que existen hoy en día provienen del Arca, tal como lo declara las Escrituras.

Leemos en el Salmo 104:29-31: “Escondes tu rostro, se turban; les quitas el aliento, expiran, y vuelven al polvo.  Envías tu Espíritu, son creados, y renuevas la faz de la tierra.  ¡Sea para siempre la gloria del Señor! ¡Alégrese el Señor en sus obras!”

Una Historia para Recordar

La historia del Diluvio Universal es un recordatorio de la santidad de Dios y del juicio venidero. Dios juzgó la Tierra con agua hace unos 4,300 años. Las Escrituras dicen que Dios la juzgará con fuego en el futuro. Lea II Pedro 3:1-13.

Los que ponen su fe en Jesucristo y su Palabra escaparán la Gran Tribulación que viene sobre toda la Tierra, y serán salvos. Quienes rehúsan poner la fe en Jesús están destinados a la destrucción y vergüenza eterna.

Si usted no ha puesto su fe en Jesús todavía, ¿por qué no hacerlo en este momento? Debe arrepentirse de sus pecados, pedirle a Dios que lo perdone, y poner su confianza en Jesús y su sacrificio en la cruz como pago perfecto por sus pecados.

“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, para que todo aquel que cree en El, no se pierda, mas tenga vida eterna.  Porque Dios no envió a su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por El. El que cree en El no es condenado; pero ¿el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios.” Juan 3:16-18

 Nota: Esta artículo ha sido extraído del libro “Génesis: El Origen del Cosmos y la Vida” por Jaime Simán © 2015 Jaime Simán
Las Escrituras Bíblicas han sido extraídas de La Biblia de Las Américas. ©1986, 1995, 1997 by The Lockman Foundation. Usadas con permiso.